Experiencia comunitaria de colaboradores del taller de autoconocimiento en Morón, de Cristina Sanchez. Testimonio de Julieta Escobar.
“Comenzó desde el esfuerzo, desde el sentido del deber, pensando “Esto es hacer el bien, hay que hacerlo con responsabilidad y fuerza de voluntad” y no estaba mal, pero todo cambió con el contacto con los chicos. Con ellos todo funciona si te olvidas de los grandes ideales y los ves realmente, te sentás a escucharlos. Los chicos son para mí, el ahora, el disfrutar para que ellos disfruten, el contactarse con la alegría del momento y transmitirla. Y en ese momento es cuando se produce la magia. Los chicos me dieron lo que no esperaba, me enseñaron lo simple, me corrieron de la maraña de mi mente. Espero haber hecho en alguno de ellos la diferencia que ellos hicieron en mí, y todo gracias al taller.
A partir de ahora mi Visión de Vida es estar atenta, muy atenta a lo que anhela mi corazón y también muy atenta a los miedos que se interponen entre mis sueños y yo. Hoy mi visión de vida es creer en que todo lo que deseo se puede hacer realidad y saber cuál es la llave de la puerta que me lleva a ello. Hoy me dispongo a explorar, experimentar mi autoconocimiento con un corazón liviano, libre, que explota de ganas de vivir! Hoy mi vida, mi campo de vida, está más ampliado, incluye cada vez más seres, mis hermanos, todos los seres, mi mundo. Mi visión es de agradecimiento, es un despertar al amor hacia mi misma que aún debo seguir recorriendo y desarrollando durante el resto de mis días.
Yo puedo, con la fuerza de mi corazón y la ayuda de mi mente. Quiero dar y captar, recibir. Estoy en el umbral de la vida que quiero, con las herramientas del corazón y la compañía para atravesarlo con alegría.”