Experiencia Comunitaria de Gustavo Costa,
colaborador de la Fundación
Corriente Cálida Humanística en el
merendero PROVIDA de Merlo:
“Mi
eterno agradecimiento a la Fundación Corriente Cálida
Humanística y
especialmente a la Sra. Cristina Sánchez, por
haberme permitido compartir esta experiencia única con todos estos hermosos
chicos.
Cuando
comencé a colaborar en el merendero Provida, mi vida dio un gran vuelco, en primer
lugar conocí a un montón de pequeños niños, con tanta necesidad de tantas
cosas, que mi cabeza no podía parar de pensar de qué forma uno puede ayudar a
estas criaturas y sin darme cuenta ya lo estaba haciendo. Los fines de semana
llevaba cosas dulces, galletitas o facturas y compartía diferentes juegos con
ellos para sacarlos de su rutina. Cada vez que me iba del merendero les sacaba
una sonrisa dándoles algún regalito.
Pero con todo esto, los chicos estaban muy felices y como dije
al principio de mi narración, en mí provocó un gran vuelco, porque con ellos
aprendí a sacarme la coraza que llevaba conmigo, pude abrir mi corazón y fue
ahí cuando dejé de pensar y comencé a abrazarlos y a sentir ese amor que con
cada abrazo cálido, ellos te envuelven de amor cada vez que los visitás.”
Como en este ejemplo, muchas personas han podido tener una maravillosa
experiencia compartiendo amor y dando lo mejor de si, gracias a la visión de vida de Cristina Sanchez,